
Termostato controla la cantidad de refrigerante que circula hacia el radiador. Funciona en conjunto con otros elementos del sistema de refrigeración, como la bomba de agua y el radiador, para mantener una temperatura estable en todo el motor. Es esencial para evitar problemas de sobrecalentamiento o pérdida de eficiencia. Revisa regularmente como parte de tu mantenimiento de rutina y asegúrate de usar el tipo de refrigerante recomendado. No dejes que un pequeño detalle arruine tu experiencia sobre dos ruedas.